La Moxibustión
Es una técnica de aplicación de calor.
Inicialmente, fue introducido en Occidente asociada a la cauterización. La técnica original servía no para cauterizar heridas abiertas sino para acabar con dolores internos.
Origen:
Está asociada a la ACUPUNTURA porque los puntos de aplicación son los mismos en los que se insertan agujas en esa terapia. Para realizarla de forma correcta debe utilizarse una temperatura adecuada. Es por eso, que en la terapia tradicional se utiliza principalmente la artemisa. El efecto es más duradero al ser producido por calor en un área mucho mayor a la de una aguja. Los efectos en dicha área serán: vasoconstricción inicial: como un reflejo ante el estímulo de la alta temperatura; vasodilatación: aumentará el riego sanguíneo en el área; y aumento de las células del sistema inmunitario, asociada a la afluencia de riego .sanguíneo
¿Qué beneficios aporta la Moxibustión?
Como una terapia de calor puede ayudar a aliviar dolores musculares. Aplicada en los puntos correctos puede afectar también a dolores asociados a zonas más internas.
En contraste con la acupuntura, con efectos similares, el efecto analgésico puede superar las 2 semanas de duración. Ayuda a tratar dolencias tan variadas como pueden ser, entre otras: las articulares, como la artrosis o la artritis; las dolencias por el frío, como la rigidez lumbar; los dolores menstruales; algunos problemas circulatorios.
Incluso, en el caso de algunos embarazos, se ha observado que la aplicación de calor en cierto punto hace que el feto cambie de posición. Se ha utilizado en las semanas previas al parto, consiguiendo que el bebé adoptará la posición adecuada.